Viernes 8 de noviembre del 2013
El Hecho
Durante la semana del 4 de noviembre de 2013, se desarrolló el proceso eleccionario de la Federación de Estudiantes y de Consejero Académico de nuestra Universidad. Tras la finalización de las elecciones el día 6, se evidencia que no hay mayoría absoluta. De acuerdo a la información publicada por el TRICEL en la madrugada del 7 de noviembre, las listas “Abajo y a la Izquierda” y “Genera Opción Universitaria” obtuvieron las dos primeras mayorías y se deberán enfrentar en segunda vuelta los días lunes 11, martes 12 y miércoles 13 de noviembre. Adicionalmente, en relación a la elección del Consejero Académico, los estudiantes Sebastián Zenteno y Sebastián Peña deberán someterse al mismo proceso.
El resultado de las elecciones da cuenta de una participación de 1.347 estudiantes, lo cual representa un quórum del 28% del electorado si se considera únicamente a los estudiantes de pregrado. Si se considera a los postgrados, también llamados a votar, el quórum disminuye a un 22%, muy por debajo del 40% como quorum mínimo establecido por los Estatutos de la Federación.
Comprensión del Hecho
La Federación de Estudiantes de la UAH celebró recientemente 15 años como institución: Nace al año siguiente de la fundación de la UAH, lo cual constituye un hito entre las universidades privadas.
El quorum de esta elección en primera vuelta representa el más bajo porcentaje de participación de los últimos años. Por otra parte, de acuerdo a información que ha circulado públicamente, este proceso ha estado marcado por ciertas irregularidades y amedrentamientos, que han ensuciado el desarrollo democrático.
Es importante considerar que estas elecciones se enmarcan en un contexto de definiciones políticas al interior de la CONFECH, de la cual FEUAH forma parte desde el 2012. Adicionalmente, se está en un escenario nacional tanto de elecciones presidenciales, como parlamentarias y de consejeros regionales. La relevancia de este contexto está relacionada con las estrategias que el movimiento estudiantil desarrollará, como actor social y político que busca incidir en las definiciones sobre educación del próximo gobierno de Chile.
Implicancias Éticas
Dentro de un sistema democrático, el ciudadano tiene el derecho, por consiguiente también el deber, de participar en las elecciones ya que constituye una forma de ejercer su responsabilidad. Las expresiones de disconformidad con el actual estado de cosas también tienen cabida porque el voto es un instrumento mediante el cual se opina sobre la situación universitaria.
Pero, ¿cuál es el objeto del voto? ¿Se vota por una persona o por un proyecto?
Todo proyecto político conlleva una visión de la universidad y de la vocación de las personas, y, por ende, una ética implícita, expresada en la jerarquización de los problemas, en la forma de su priorización y en los caminos escogidos para su cumplimiento y resolución. Todo ello está ligado al valor o a los valores que se establecen como prioritarios.
Desde un punto de vista ético, resulta imprescindible volver a las preguntas fundamentales: ¿qué tipo de universidad se está generando con las decisiones que adoptamos?; ¿se está cumpliendo la misión y los objetivos académicos y formativos de la UAH?; los niveles y formas de participación expresados hasta ahora en esta elección, ¿están contribuyendo a una convivencia universitaria fraterna e inclusiva, que sea señera en el país?
Elementos para el discernimiento
En los tiempos actuales se hace cada vez más difícil una identificación completa con un partido o movimiento político, debido a la fragmentación cultural del significado y a la presencia de una sociedad más pluralista. No obstante, un sentido de responsabilidad ciudadana y solicitud para con el otro estimulan a la participación, en lugar de restarse, ya sea optando por un proyecto, ya sea expresando disconformidad al sistema empleando métodos al alcance (por ej., voto en blanco).
El principio del bien común es un horizonte fundamental en el proceso de discernimiento electoral. Este principio, en la ética cristiana, señala la capacidad de detectar las necesidades, la habilidad de jerarquizarlas y la sabiduría para escoger las soluciones viables correspondientes a la promoción de la bien mayor del ciudadano y de la sociedad, y, en este caso, de la Universidad.
Junto con expresar nuestra preocupación por los bajos niveles de participación vistos en estas elecciones, sumado a situaciones irregulares y amenazas de conatos y riñas entre estudiantes que nos alejan de nuestra misión y cultura institucional, llamamos a todos los estudiantes de nuestra Universidad a participar de las elecciones de sus representantes estudiantiles en la segunda vuelta. La Universidad crece en la medida que cuenta con organizaciones estudiantiles serias, formales, estables y representativas, con las cuales pueda dialogar en un marco de respeto, armonía y búsqueda del bien común.
Centro de Ética y Centro de Reflexión y Acción Social
Universidad Alberto Hurtado