Relaciones entre la sociedad y la naturaleza: ¿Qué entendemos por naturaleza?
La naturaleza es un concepto enorme. Cuando nos referimos a ella, pensamos en ocasiones en el campo, en los animales, incluso en los árboles y en el pasto que forma parte de la pequeña plaza del barrio. Si lo analizamos más detalladamente, podemos observar que la naturaleza varía según el contexto en el que nos encontremos, incluso la noción sobre ella puede ser muy diferente para alguien de la ciudad y para alguien que viva, por ejemplo, más al sur.
Nicolás Floriani, de la Universidad Estatal de Ponta Grossa, Brasil; Juan Carlos Skewes, director Departamento de Antropología UAH; Fredderick J. Conway, de la Universidad Estatal de San Diego y Diego Escolar, de la Universidad de Buenos Aires.
En la mesa redonda “Árboles, personas, desiertos y montes: ¿Cómo hablar con la naturaleza?”, realizada por el Departamento de Antropología de la Universidad Alberto Hurtado, se debatió sobre las relaciones entre la humanidad y la naturaleza, la cual estuvo encabezada por el profesor Juan Carlos Skewes. Además, contó con la participación de expositores internacionales como Fredderick J. Conway, profesor de la Universidad Estatal de San Diego; Diego Escolar, doctor en Antropología de la Universidad de Buenos Aires; Y Nicolás Floriani, profesor de la Universidad Estatal de Ponta Grossa, Brasil.
La instancia dio espacios para que el público presente diera su opinión sobre su percepción de naturaleza, en relación a lo expuesto por los académicos y expertos.
Sobre la importancia de compartir nociones sobre naturaleza interdisciplinarmente, el profesor Floriani señalo que “es importante bajar un poco la guardia para dialogar sobre todo. Compartir sobre un concepto y un problema común”. El doctor en Medio Ambiente explicó la necesidad de que “todas las miradas deben converger hacia un mismo problema”.
En cuanto al escenario actual que tenemos en Latinoamérica, el académico de la Universidad de Buenos Aires, Diego Escolar, afirmo qué “el desafío es entregar una educación ambiental que no fetichice la naturaleza, es decir, que abandone el discurso moral de que la naturaleza es por sí misma buena, y que la sociedad y los seres humanos somos lo malo”.
“Es necesario vincular la idea de democracia, con la idea de educación ambiental. No la idea de una lucha entre la sociedad y la naturaleza, sino de buenas decisiones, y no solo del Estado, ni de un sector, sino que las comunidades locales también tengan decisión sobre su ambiente”, finalizó Escolar.