Durante esta etapa de lanzamiento de nuestro nuevo sitio web, escríbenos tus dudas, consultas o comentarios al WhatsApp +569 3455 2723.

Juan Pablo Vásquez: “El voto popular no se condice con la composición y el voto final del Colegio de Electores en EE.UU.”

Fuente: Ciper El pasado 5 de noviembre se celebraron las elecciones generales en Estados Unidos, que incluyeron, entre otros órganos, el Poder Legislativo en ambas cámaras y la presidencia de […]

  • Compartir
  • Facebook
  • Twitter
  • Linkedin
  • Whatsapp

Fuente: Ciper

El pasado 5 de noviembre se celebraron las elecciones generales en Estados Unidos, que incluyeron, entre otros órganos, el Poder Legislativo en ambas cámaras y la presidencia de la República. Si bien, el mundo suele estar pendiente de este proceso electoral, y las autoridades de Estados Unidos, en tanto autoridades del país hegemónico del orbe en el último siglo, operan con un poder efectivo que va mucho más allá de sus propias fronteras, hay aspectos esenciales del proceso electoral norteamericano que accionan como límites concretos a la democracia, la soberanía popular y el voto como elemento igualador de la ciudadanía, y que son poco señalados en las discusiones y coberturas mediáticas, que, al contrario, en muchos casos plantean a Estados Unidos como una democracia ejemplar en el mundo occidental.

En primer lugar, y tal vez lo más reconocido socialmente, es que a diferencia de la gran mayoría de las democracias occidentales, por ejemplo las de América Latina, la elección del presidente de la República en Estados Unidos no se hace por voto popular, más bien, se trata de un voto indirecto. Cada sufragante marca preferencia en su papeleta por una fórmula presidencial (Presidente y Vicepresidente), que en realidad suma al conteo del Estado en particular de cada sufragante (Por ejemplo, California, Michigan o Utah). De acuerdo al resultado de la elección en cada Estado, se designan los representantes de cada uno de ellos para el denominado Colegio Electoral, quienes son burócratas no electos encargados de decidir finalmente al Presidente de la República, y que han sido asignados previamente por su propio partido a cumplir este rol en caso de que su fórmula presidencial gane en su estado en cuestión.

Este Colegio Electoral se compone por 538 electores provenientes de los distintos Estados. Sin embargo, cada Estado aporta un número diferente de electores, lo cual se define de acuerdo al número de representantes en el Congreso. Es decir, el número de electores de cada Estado es igual a la suma de sus senadores y sus miembros en la Cámara de Representantes (la cámara baja de Estados Unidos). Al total nacional hay que sumar tres electores de Washington D.C. Por eso, para ser electo como presidente, cualquier candidato necesita 270 votos del Colegio Electoral, la mitad más uno de los 538 electores.

Se ha señalado que este sistema, el cual viene desde los primero procesos electorales de Estados Unidos, persigue un punto intermedio entre el voto popular y la democracia indirecta, que permite mantener los equilibrios y balances entre los distintos estados y sectores, y que busca evitar la dictadura de las mayorías y un excesivo poder de los partidos ( Redondo, 2016 Maidana, 2022 ). Sin embargo, la realidad, es que con este sistema hay sectores y Estados del país que están sobrerrepresentados electoralmente, por lo tanto, el voto de aquellos sectores y Estados vale más y tiene más poder, que el voto de los otros estados y sectores. Tanto así que, es posible bajo este sistema, que un candidato que sacó menos votos en el total nacional que su contrincante, sea escogido por el Colegio de Electores como Presidente de la República. El voto popular no se condice necesariamente con la composición y el voto final del Colegio de Electores. Es por eso que, solo mirando el siglo XXI, dos presidentes de los Estados Unidos obtuvieron en realidad menos votos que sus rivales, George W. Bush en el año 2000 y Donald Trump en el año 2016, ambos del Partido Republicano. Asimismo, en este mismo siglo, sólo dos veces un presidente republicano ha ganado tanto en el colegio de electores como en votación popular, una de ellas es la elección de este 2024.

Juan Pablo Vásquez: Doctor en Estudios Americanos con Especialidad en Estudios Internacionales. Académico del Departamento de Política y Gobierno de la Facultad de Ciencias Sociales UAH.

Adam Esrig: MA in International Affairs (New School University). Teacher at NYC Department of Education

Noticias Relacionadas