El pasado martes 5 de marzo el Instituto de Música (IMUAH) vivió un significativo momento: la maestra Violaine Soublette, quien ha desempeñado un papel fundamental como directora de Interpretación Superior mención Canto, dejó la dirección de la carrera para dar paso a Gonzalo Simonetti.
Durante la jornada, donde estuvieron profesoras y profesores del IMUAH, además del decano FILHUM Eduardo Molina, se rindió un emotivo reconocimiento a Violaine por su trascendental labor y dedicación a lo largo de los años: no solo ha sido una pieza clave en el desarrollo de la Interpretación Superior mención Canto, sino que también desempeñó un rol crucial en el proceso de integración del Instituto de Música de Santiago, fundado por Sylvia Soublette, a la Universidad Alberto Hurtado, en 2008, siendo directora de departamento hasta 2011 y luego directora de la cátedra de canto.
Su trabajo y visión han sido muy importantes para el crecimiento y desarrollo académico del Instituto, logrando posicionar a la carrera como una de las más importantes del país. A pesar de dejar la dirección, Violaine Soublette continuará su valioso aporte a la labor académica como profesora, coordinadora del Concurso Mujeres en la Música al interior de la UAH, y como miembro activo del comité de extensión, entre otras responsabilidades.
Conversamos con ella sobre su trayectoria, logros y reflexiones en relación al IMUAH, su destacada labor y sobre su visión del futuro de la carrera.
—¿Cuál crees que ha sido tu contribución más significativa durante este tiempo en el Instituto de Música UAH?
Mi rol en la fundación del IMUAH junto a distinguidos académicos de la Facultad de Filosofía y Humanidades. Instaurar un proyecto educativo con la creación de la Pedagogía en Música y la Interpretación Superior mención Canto y desde un comienzo contar con un área de extensión artística, con su temporada oficial de conciertos y la temporada de extensión docente a cargo de las cátedras.
—La cátedra de canto ha logrado destacarse bajo tu dirección, ¿cómo ha sido este proceso y qué lo ha impulsado?
Partimos en 2008 con 12 estudiantes y rápidamente la carrera fue ganando prestigio, por la calidad y el compromiso de sus académicos, por lo atractivo de la malla curricular y por nuestra política de hacer participar a los estudiantes desde sus inicios en los proyectos artísticos. Su formación no es solo en el ámbito teórico, sino también en el ámbito práctico, para que vivan desde adentro cómo es esta profesión.
—¿Hubo algún momento o producción que te haya marcado especialmente?
El estreno de La Rara. Violeta Parra es un personaje que tiene mucha significación para mí, porque mi papá (Gastón Soublette) fue la persona que transcribió parte importante de su obra; ella no conocía la nomenclatura musical, entonces cantaba y mi papá pasaba la melodía a una partitura. Por eso para mí concretar esta idea fue importante. Nació como una inspiración que reunió a todos los estamentos del IMUAH. Habíamos tenido muy buenas experiencias con René Silva y Marcela Sáiz y dije ¿Por qué no juntar a estas dos buenas experiencias? Finalmente salió una producción nuestra que fue realmente exitosa.
—¿Cómo describirías tu relación con los estudiantes, tanto personal como profesionalmente?
Es posible que no todos me hayan apreciado en un comienzo; puede que me hayan percibido muy exigente y rigurosa, porque la carrera no parte cuando uno sale de la universidad, sino desde el día en que pones un pie en el Instituto de Música. Hoy en día creo que la mayoría de ellos me tiene respeto, incluso afecto.
—¿Qué reflexiones sociales y culturales has podido hacer en este tiempo en el IMUAH?
Creo que todo lo que se haga por la cultura y por las artes es un plus para cualquier institución. Las manifestaciones artísticas nos enseñan, nos hacen reflexionar sobre lo más profundo de nuestro ser y por qué no decirlo, el arte tiene la capacidad de salvar vidas, porque he conocido muchas personas que gracias a ella han logrado salir de lugares de los que nunca pensaron que podrían hacerlo.
—¿Qué te gustaría que pasara con la carrera de Interpretación Superior Mención Canto y cómo crees que tu legado influirá en ello?
Un anhelo, un sueño, es hacer un festival de ópera universitario. Se dan momentos de gran calidad artística en exámenes o presentaciones y es una pena no poder compartir esos logros con el público. Por otra parte, sería una instancia de creación de audiencia: no todos pueden pagar una entrada a una función de ópera del Teatro Municipal, pero muchos podrían encantarse con la ópera viendo el resultado de nuestro trabajo y darse cuenta de que ese género artístico no es difícil de comprender.
Es un trabajo que no he hecho sola; acá ha habido muchos actores que han aportado increíblemente al crecimiento de la carrera y del IMUAH. Y el próximo director por supuesto pondrá de su impronta para hacer crecer más aún este espacio, trabajando desde lo que hay y lo que se ha logrado. —Violaine Soublette
—¿Con qué sensación te quedas?
Estoy feliz de estar aquí; sinceramente me encanta que el Instituto de Música pertenezca a la Facultad de Filosofía y Humanidades UAH, porque significa que la música está en el mismo rango de las otras disciplinas y eso hace que a los y las intérpretes les veamos con el respeto que merecen.
Por Gabriela Gárate