La Constitución chilena será pionera en establecer la paridad y el movimiento feminista se la juega en establecer principios en la defensa de los derechos de la mujer como esenciales en la organización del poder. En ese sentido, Catalina Lagos, única militante del PS disputando un escaño en su distrito, quiere ser parte de este proceso histórico en pro de avanzar hacia un país con justicia social y de configurar la igualdad de género. En términos personales, sus referentes son mujeres comprometidas, consecuentes y valientes “como mi madre”, dice. Su arma es su trayectoria.
Catalina Lagos (38) trabaja como defensora de los derechos humanos hace años, ejerció en un consultorio jurídico durante doce meses en la Legua de Emergencia, fue parte del equipo jurídico de Corporación Humanas en el caso de la jueza Karen Atala, a quien le quisieron arrebatar la tuición de sus hijas por su orientación sexual. También integró el equipo constitucional del Instituto Igualdad cuando la ex presidenta Michelle Bachelet impulsó su proyecto de cambio constitucional, y fue asesora legislativa del Ministerio de la Mujer en el proceso de despenalización del aborto en tres causales. Actualmente se desempeña como profesora del Departamento de Derecho Público de la Universidad Alberto Hurtado y es coordinadora de la Unidad de Investigaciones Especializadas en Acoso Sexual, Acoso Laboral y Discriminación Arbitraria de la Universidad de Chile: “Tomé conciencia de la situación de subordinación y de discriminación estructural de las mujeres en la Universidad en el aula de Lidia Casas. Hasta entonces pensaba que la única forma de opresión era la clase, luego de eso, comprendí que hay múltiples estructuras opresivas a las que hay que hacer frente, y justamente eso es lo que trato de transmitir en mi labor docente, enseñando cómo el Derecho Internacional de los Derechos Humanos aborda esas situaciones”, sostiene.
Conversamos con ella y le pedimos que nos contara cuál es el artículo de la Constitución del ‘80 que le genera más ruido, qué propone y cómo su formación profesional académica le aporta para enfrentar el debate público y una campaña en una de las zonas más peleadas de esta convención.
-¿Cuándo y en qué circunstancia fue la primera vez que leyó el texto constitucional?-
– La primera vez que leí la Constitución fue en el colegio en el curso de educación cívica y al mismo tiempo estudiamos la Declaración Universal de Derechos Humanos. Recuerdo que en ese momento comprendí que los derechos humanos requieren protección tanto a nivel nacional como internacional, y pensándolo en retrospectiva, ese fue el comienzo de mi camino por la defensa de los derechos humanos.
-¿Cuál es el artículo que le genera más ruido?-
-Me impresionó mucho que el artículo 1° en el texto original de la Constitución de 1980 dijera “los hombres nacen libres e iguales en dignidad y derechos” y que la palabra “hombres” recién fuera sustituida por la de “personas” en 1999.
-¿Y qué quiere aportar a la Constituyente?-
-En esta materia, mi propuesta para la nueva Constitución es que se incorpore la perspectiva de género desde el primer al último artículo.
-¿Cómo se debería incorporar la perspectiva de género en la Constituyente?-
-Se debe consagrar el principio de igualdad sustantiva y el principio de corresponsabilidad social que redistribuya el trabajo doméstico y de cuidados entre hombres, mujeres y el Estado. Asimismo se deben reconocer derechos específicos, como el derecho a una vida libre de violencia y los derechos sexuales y reproductivos. Además de complementar los derechos ya reconocidos, a luz de las experiencias de las mujeres y colectivos LGTBI+. Y finalmente, se requiere establecer una democracia paritaria, que redistribuya el poder político con perspectiva de género.
-¿Cómo el trabajo académico aporta en su candidatura?-
-Sin duda, la experiencia docente ha sido una valiosa herramienta para mi candidatura. Me ha permitido acercar los contenidos y debates constitucionales a la ciudadanía de manera simple y comprensible, es decir, me ha permitido colaborar en la democratización del conocimiento. Y por otra parte, me ha permitido traducir las inquietudes, problemáticas y demandas que he recibido de la ciudadanía en el terreno en lenguaje constitucional y del derecho internacional de los derechos humanos. Asimismo, el ramo Optativo de Profundización (OPR) sobre “Constitución y Género” que dictamos con la profesora Bárbara Sepúlveda el semestre pasado en la UAH, fue un ejercicio muy enriquecedor de reflexión en torno a la necesidad de una Constitución Feminista.
El programa completo de Catalina Lagos @catala_style se puede revisar en el sitio Servel.cl