La vida y música de Cecilia, “la incomparable”, emocionaron a la comunidad universitaria en un espectáculo inolvidable. El montaje reunió a las cinco compañías artísticas de la Universidad Alberto Hurtado, destacando el talento y el trabajo colaborativo.
Por Aracelly Bravo Saavedra
El viernes 22 de noviembre, con el Ágora de la Universidad Alberto Hurtado completamente lleno – tanto en la función de las 13:00 como en la de las 19:00 horas – se estrenó “Huellas 2024: Cecilia”, un emotivo homenaje a la icónica cantante chilena. Este tradicional montaje, liderado por el Área de Arte y Cultura de la Dirección de Asuntos Estudiantiles (DAE), reunió el talento de las compañías de Teatro, Danza, Coro Polifónico, Orquesta y Ensamble Aguayé.
La obra no solo destacó por su calidad artística, sino también por su capacidad de contar una historia. A través de la música, el baile y la actuación, las y los estudiantes relataron la vida de Cecilia, sumergiendo al público en su legado cultural. “Fue un espectáculo fantástico. Felicitaciones a todas y todos quienes lo hicieron posible”, comentó emocionado Andrés Castro, encargado del Programa de Arte y Cultura de la DAE.
La magia de Huellas
La preparación de Huellas 2024 comenzó en abril, con reuniones para definir al artista homenajeado y diseñar el concepto. El montaje involucró un proceso colaborativo entre las cinco compañías artísticas, que trabajaron de manera independiente y luego unieron esfuerzos en ensayos generales. Según Melissa Astudillo, asistente del Programa de Arte y Cultura, esto permitió “crear una narrativa integral que combina música, danza y actuación en una experiencia única”.
Un detalle destacado fue la incorporación de cuatro intérpretes que personificaron diferentes etapas de la vida de Cecilia. Estas estudiantes fueron seleccionadas tras una convocatoria abierta y ensayaron junto a las compañías, aportando frescura y dinamismo al espectáculo.
Así, Huellas se ha consolidado como una tradición universitaria que combina arte, investigación y memoria cultural. Cada año, las compañías trabajan en conjunto para homenajear a figuras emblemáticas de la cultura chilena, como Víctor Jara, Violeta Parra, Patricio Manss y ahora Cecilia.
“Es mucho más que un concierto o una obra de teatro. Es una producción que rescata el legado de nuestros artistas y lo presenta desde una perspectiva multidimensional”, afirmó Andrés.
El espectáculo, que duró aproximadamente una hora, contó con iluminación, amplificación y una puesta en escena que dejó al público cautivado. “La función nocturna fue un éxito total. Ver el Ágora lleno y escuchar los aplausos nos confirma que este trabajo vale la pena”, añadió Melissa.
Huellas no solo celebra el arte, sino también el espíritu colaborativo de la comunidad universitaria. “Es una actividad que une a estudiantes de distintas disciplinas en torno a un proyecto común. Aquí se ve la pasión, la dedicación y el talento de nuestras y nuestros estudiantes”, concluyó Castro.