Para la autoridad de la UAH, uno de los temas más relevantes de estos últimos meses es, sin duda, la Reforma a la Educación Superior y las implicancias que tendrán las modificaciones propuestas por el Gobierno. Proyecto que comienza a discutirse en septiembre y que debiera entrar en vigencia en el año 2017.
El Vicerrector enfatiza que el anuncio de gratuidad para algunas instituciones, a partir del año 2016, distorsionó la discusión de fondo, enfocando el debate exclusivamente en el tema del financiamiento de la docencia. Es así como señala: “el caso nuestro es un buen ejemplo, ya que el problema no es sólo cómo los estudiantes financian sus carreras, sino también cómo se financia la investigación, la vinculación con el medio y la extensión que realiza la Universidad. Esa integralidad es la que está presente en el proyecto académico de la universidad y que en la discusión sobre gratuidad para el 2016 está ausente. Por lo tanto, tenemos que tener la capacidad de hacer ver, en la discusión pública, ambas dimensiones del problema”.
“Dentro de los desafíos que nos plantea este segundo semestre, como universidad, está poder analizar y tomar posición frente a los efectos de corto y largo plazo que tiene el debate sobre la nueva ley de educación superior y la implementación de la gratuidad en el 2016”.
En lo concreto, si finalmente la Universidad Alberto Hurtado califica dentro de las instituciones cuyos estudiantes vulnerables podrían optar a la gratuidad a partir de 2016, eso implica una serie de ajustes para el proceso de Admisión del próximo año. “Tenemos que fijar vacantes, cupos, y eso hay que hacerlo de aquí al 23 de agosto y lo estamos haciendo en ausencia de información relevante. Es una reflexión difícil porque la información es parcial y va cambiando”, señala respecto a las constantes variaciones que ha tenido el anuncio de gratuidad de parte del ejecutivo.
NO ‘DORMIRSE EN LOS LAURELES’
Con esa conocida frase, resume el titular de la Vicerrectoría Académica, otro de los retos institucionales de esta última mitad del 2015: reforzar los logros obtenidos. “El principal logro que tuvimos este años fue haber obtenido la acreditación institucional por 5 años, en las 5 áreas. Sin embargo, no podemos ‘dormirnos en los laureles’:.este logro significó un gran esfuerzo institucional, pero desde el día uno de los 5 años que tenemos por delante, tenemos que trabajar para reforzar ese reconocimiento, lo cual tiene distintas expresiones en cada una de la áreas en las cuales nos acreditamos”.
En el caso de la docencia de pregrado, por ejemplo, la mantención de la calidad alcanzada continúa con la acreditación de los distintos programas. Actualmente 22 de ellos cuentan con esa calificación y este semestre se encuentran en proceso de reacreditación los siguientes: Licenciatura en Historia, Licenciatura en Filosofía y Licenciatura en Lengua y Literatura.
“En ese mismo plano, yo creo que el hecho que hoy casi nadie discuta que, si hay gratuidad para las privadas, la Universidad Alberto Hurtado debiese estar dentro de esa gratuidad, es sin duda un logro, es un reconocimiento y tenemos que reforzarlo”.
PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA PARA LOS PRÓXIMOS 5 AÑOS
Luego de los desafíos que implica la nueva legislación en educación superior y no ‘dormirse en los laureles’ respecto de los logros obtenidos, la planificación estratégica para el período 2015-2020 es el desafío institucional más importante para el Vicerrector Pedro Milos. “Una planificación que hay que tomarla como una oportunidad para reafirmar todo aquello que sentimos que hemos venido haciendo bien y que es necesario que sigamos haciendo hacia el futuro, pero también es la oportunidad de reflexionar sobre aquellas cosas que tal vez ya no tenemos que seguir haciendo, o que tenemos que mejorar sustancialmente”.
Para el académico, ya pasó el momento en que la Planificación Estratégica tenía por objetivo principal el crecimiento sostenido y la consolidación del proyecto universitario. “Hoy ya tenemos una universidad que es conocida y reconocida, que ha sido acreditada y que está instalada en sus áreas de conocimiento, con 30 programas de pregrado y casi la misma cantidad de postgrados y 4 doctorados”.
“Lo que tenemos que planificar para los próximos 5 años es aquello que queremos confirmar; modificar lo que ya cumplió una función en los años anteriores y ya no es tan necesario; y abrir espacios a cosas nuevas, que tal vez no las vamos a poder agregar si no renunciamos a otras. La planificación estratégica es un desafío interesante porque nos da la oportunidad de empezar a modelar un poco mejor lo que queremos ser y hacer; hasta ahora hemos hecho lo que debíamos y, por lo tanto, terminada esa fase tenemos que tomar algunas decisiones. Eso, mirado con perspectiva, no puede ser si no positivo, porque nos permite modelar mejor lo que queremos seguir haciendo hacia adelante”.
Entre los principales temas que se deben reflexionar, destaca la modernización del gobierno institucional, la participación de los distintos actores de la comunidad universitaria y proyectar un desarrollo cualitativo más que cuantitativo, en ámbitos como la infraestructura y la extensión.
INICIO DEL SEMESTRE
Aunque este semestre comenzó con total normalidad, según el calendario académico, el Vicerrector académico admite que se inició “con un cierto nivel de restricciones de espacio y complicaciones para la fijación de horarios, que derivó en un uso mucho más intensivo de las salas de clases. La Universidad, sin embargo, demostró la capacidad de resolver -en un tiempo muy escaso- una merma transitoria de casi un 40% de sus espacios físicos, derivada del incendio de la torre Los Héroes”.
En cuanto a mejoras en infraestructura, adelanta que para enero del próximo año estarán disponibles los nuevos espacios para los programas de arte, ubicados en Almirante Barroso 62. Las nuevas dependencias están especialmente diseñadas para albergar talleres de formación y exposiciones de los estudiantes del Departamento de Arte de la Facultad de Filosofía y Humanidades.