Pensar en una idea es el punto de partida, pero ser capaz de formularla como proyecto y aplicarla en la vida real constituye todo un logro. Por eso, si tienes algo en mente que podría ser un aporte para el bien común, este llamado es para ti: el lunes 28 de agosto se inició el periodo de postulación a los Fondos Concursables Incuba UAH, creados en 2017 con la finalidad de impulsar iniciativas de voluntario estudiantil autogestionado.
Soledad Villarroel, coordinadora de Incuba UAH, explica que pueden participar equipos integrados por estudiantes de pregrado, postgrado y egresados/as de todas las carreras que imparte la UAH. En función de la diversidad de intereses de nuestra comunidad hurtadiana, existen 8 líneas de participación: Arte y Cultura, Deporte y Vida Saludable, Académica, Iniciativa Socialmente Comprometida, Sustentabilidad, Género y Convivencia Universitaria, Continuación de proyectos de A+S y, a partir de este año, se suma la línea de Innovación y Emprendimiento Social, gracias a una alianza con la nueva Facultad de Ingeniería.
“Diseñar y ejecutar proyectos no solo permite a los/as estudiantes impactar de manera positiva en sus públicos objetivos, ya sean internos o externos, sino que también les permite desarrollar habilidades transversales que contribuyen a mejorar sus perfiles de egreso, por ejemplo, diseño y formulación de proyectos, liderazgo responsable, trabajo en equipo y colaborativo, comunicación asertiva y efectiva, herramientas para el trabajo territorial, entre otras”, detalla Soledad Villarroel.
La coordinadora destaca también que Incuba UAH cuenta con dos espacios formativos para quienes deseen potenciar sus talentos: el Programa de Formación para Agentes de Cambio y el Taller de Formación de Mentores.
El impacto de Incuba UAH a través del tiempo
En sus siete años de existencia, Incuba UAH ha financiado 93 proyectos de voluntariado estudiantil, beneficiando en forma directa a 645 estudiantes de pregrado, postgrado y egresados/as, con una inversión total de más de 27 millones de pesos y una estimación de más de 12 mil personas impactadas. Y aunque es difícil mencionar cuáles de estos proyectos destacan por sobre el resto, a juicio de Soledad Villarroel, las iniciativas surgidas en pandemia tienen un mérito especial: “El COVID-19 nos obligó a adaptarnos a la virtualidad, para luego volver a la presencialidad. En este sentido, los proyectos de convivencia universitaria, cuyo propósito es crear una comunidad multidisciplinar que reúna a estudiantes diversos en torno a un interés común, han sido claves para contribuir en la generación de entornos seguros, con relaciones sanas, que permitan el desarrollo integral de nuestros estudiantes. Como Incuba UAH, hacemos un aporte al bien común reforzando la identidad “hurtadiana” y el compromiso de esta universidad con el territorio y la sociedad que compartimos”.
“Más se pierde no intentando”
Fernanda Yuz es estudiante de Licenciatura en Teoría e Historia del Arte, parte del colectivo ReCortados y co-ejecutora del proyecto “Introducción al Collage Análogo”, iniciativa beneficiada con uno de los Fondos Concursales Incuba UAH. “La idea de postular partió con Pablo, nuestro instructor, quien practica esta técnica de forma profesional. Desde aquí surgió la intención de llevar el collage más allá de las clases, generando exposiciones para que los estudiantes supieran que existía este tipo de espacios dentro de la universidad. “Me di cuenta de que los proyectos que financia Incuba UAH pueden aportar de forma significativa a las personas, ofreciendo un espacio de reunión seguro. Un pequeño cambio en la rutina puede mejorar toda una semana de estrés”, relata.
Pensando a futuro, Fernanda comparte que están buscando como grupo otras formas para ampliar el alcance del taller de collage. “Ya se empezó a impartir en la Biblioteca de Santiago y queremos abrir la convocatoria para que los vecinos asistan también, y así fomentar ambientes creativos, abriendo la universidad a nuevas posibilidades de relacionamiento con la sociedad”, añade.
Desde su propia vivencia, la estudiante de la UAH reconoce que siempre es difícil embarcarse en un proyecto, pero recalca que nada que valga la pena es sencillo. “Hacen falta soñadores que se atrevan a generar iniciativas que hagan crecer a la UAH. Pequeños cambios, como querer juntarse con más personas para compartir un interés en común, pueden transformarse mañana en grandes proyectos que no podías imaginar que llegarían tan lejos… Solo deben comenzar con creer que pueden ser posibles. Sean intrépidos, más pierden no intentando”, enfatiza Fernanda Yuz.
Mentores para un futuro más solidario
Vicente Pozo, estudiante de Educación Básica (mención Matemática y Ciencias Naturales) es coordinador del proyecto “Andamio”, otra de las iniciativas que ha recibido el apoyo de Incuba UAH, y cuyo objetivo es apoyar a los estudiantes de primer año, para que puedan adaptarse con mayor facilidad al ritmo universitario. “La incubadora es una forma de hacer realidad las ideas que tenemos para poder impactar a la comunidad universitaria; es ese puente que se necesita para dar los primeros pasos, darse a conocer y crecer”, relata Vicente, quien además participa en el Programa de Mentorías, experiencia que califica como un enorme aporte: Siempre recalco la suerte que he tenido de estar en la Incubadora, ya que ha contribuido para una formación ligada a la gestión, al desarrollo de proyectos y al uso de metodologías para la organización, lo que me ha guiado a generar otros proyectos ligados a la investigación”, concluye.
¿Logramos motivarte? Entonces te invitamos a revisar más detalles en: https://incubauah.uahurtado.cl/postulacion/